Norris dio un paso al frente y ya tienen claro en McLaren que el enemigo es Verstappen

Lando Norris no quiere que se le escape su primera corona en la Fórmula 1. Sabe que, con su ventaja de 12 puntos sobre Max Verstappen y 16 sobre Oscar Piastri con 25 en juego, es el que más tiene que perder de los tres contendientes al título. Y ese trofeo, que se exhibe en el circuito de Yas Marina este fin de semana, es todo por lo que ha trabajado en su vida, según confesó en la previa. Su rendimiento de este viernes lo confirmó: el inglés fue el mejor en las primeras prácticas libres y se dio el gusto de dejar detrás al tetracampeón neerlandés, algo que de conseguir también el domingo lo convertirá en el nuevo monarca de la categoría.

La FP1, con nueve titulares que les entregaron sus autos a pilotos tester, dejó a Piastri fuera de la lucha: el australiano miró desde el pitwall cómo su McLaren conducido por el mexicano Pato O'Ward terminaba 14° y su compañero de equipo, con un registro de 1m24s485, le ganaba virtualmente -por ocho y 16 milésimas- a Verstappen y Charles Leclerc, que se dio el gusto de comenzar su gran premio 150 en la F1 con su hermano menor Arthur al lado, en la Ferrari de Lewis Hamilton.

En la segunda libre, ya con Piastri de vuelta, lo de Norris fue aplastante. En una pista en condiciones climáticas similares a las que se afronarán en la clasificación del sábado y en la carrera del domingo -después del atarceder en Medio Oriente-, los tiempos se derrumbaron y el inglés se impuso en la sesión con un registro de 1m23s083. Lo máximo a lo que pudo acercarse Verstappen fueron 363 milésimas, mientras que George Russell se metió tercero, a 379, delante de un brillante Oliver Bearman (Haas) y de unos Sauber que impresionaron con su ritmo a una vuelta con el motor Ferrari que, por el contrario, encontró a los autos de la escudería italiana en los puestos 8 y 14, otra vez con un Lewis Hamilton muy lejos. ¿Qué ocurrió con Piastri? Cometió errores en sus intentos y quedó a 680 milésimas.

Fue entonces, entre FP1 y FP2, cuando Zak Brown enfrentó a la prensa en la habitual conferencia de prensa de los viernes de la FIA y la pregunta sobre la orden de equipo -esa que no apareció en Qatar y se convirtió en el gran error de estrategia de McLaren- apareció. "Mientras ambos pilotos tengan la oportunidad de ganar el Campeonato Mundial -y claramente la tienen ahora mismo-, todo seguirá igual. Son libres de competir. Obviamente, seremos prácticos y realistas. Si, a medida que avance el fin de semana o la carrera, queda claro que uno tiene muchas más posibilidades que el otro, entonces somos un equipo que quiere ganar el Campeonato de Pilotos y competiremos en consecuencia, haciendo todo lo posible para que ese piloto esté por delante e intente ganar la carrera. Nuestras órdenes de equipo se han centrado en dar las mismas oportunidades de ganar el campeonato. Pero si, a medida que avance la carrera, queda claro que ambos no pueden, haremos lo que sea mejor para el equipo e intentaremos ganar el Campeonato de Pilotos. Estaríamos locos si no lo hiciéramos", dijo.

"Así que vamos a usar el sentido común -profundizó el CEO del equipo inglés-. No vamos a tirar por la borda un Campeonato de Pilotos por un sexto y séptimo puesto, un tercero y cuarto, un quinto y sexto si uno de nuestros pilotos no tiene la oportunidad. Nuestros pilotos son excelentes compañeros de equipo. Han demostrado que trabajarán por los intereses del equipo, y por supuesto, también por los suyos, así que tengo mucha confianza". También aclaró que si ninguno de los dos logra el campeonato, "será una decepción, pero Max no es un tetracampeón del mundo fácil de derrocar".

Aunque dice el dicho que las carreras hay que correrlas, Norris dio un paso adelante en el primer día en Abu Dhabi, pero esta tierra sabe de milagros tanto como Verstappen, que aquí fue campeón del mundo por primera vez hace cuatro años, en aquella recordada definición con Lewis Hamilton en la última vuelta.